Ahora que el sol empieza a calentar y a ser peligrosa su radiación, hemos hablado con la doctora Marta de Quixano Burgos, jefe de servicio de Pediatría del Hospital El PilarEste enlace se abrirá en una ventana nueva, quien nos ha advertido de los 10 errores más frecuentes que cometemos con nuestros hijos y la exposición solar.

10 errores muy comunes al tomar el sol con niños

  1. Exponerse al sol entre las 12:00 y las 17:00 horas. Hay que señalar que son las horas centrales del día, por lo que no se debe tomar el sol durante esa franja horaria.
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  2. Usar cremas solares con un factor de protección solar, FPS, muy bajo. Lo más adecuado es elegir un FPS de 50 para niños y bebés.
  3. Utilizar cremas solares que no son específicas para la infancia. Es preferible utilizar los productos que se han elaborado especialmente para niños.
  4. No aplicar cremas y leches hidratantes, que son los fotoprotectores más recomendados para los menores, incluso para los bebés
  5. Usar cremas solares que no resisten al agua ni a la sudoración. Lo mejor es elegir fotoprotectores a prueba de agua, ya que los niños suelen tomar largos baños en la piscina y en la playa, o juegan a actividades físicas que causan un exceso de sudoración.
  6. No repetir la aplicación del protector. Es muy importante aplicarlo de nuevo cada 2 horas, aunque se esté utilizando uno con resistencia al agua.
  7. No aplicar el protector si el día está nublado. Lo cierto es que las radiaciones solares pueden traspasar las nubes, así que también se debe proteger la piel de los niños durante estos días menos soleados.
  8. Aplicar el protector en el mismo momento de la exposición al sol. Esto es un error, lo correcto es aplicarlo media hora antes de salir de casa, utilizando para ello una buena cantidad de producto.
  9. Limitar el uso del fotoprotector únicamente en la piscina o la playa. Sin embargo, no son los únicos lugares donde se expone al sol al niño. Por eso, recomendamos poner la crema solar siempre que vaya a salir al aire libre, incluso si la familia se va a dar un paseo. Esto incluye las excursiones a la montaña donde hay una mayor altitud y, por tanto, la piel se quema con mayor rapidez.
  10. No aplicar bien el fotoprotector. Para hacerlo bien, se debe frotar y extender muy bien la crema por las zonas del cuerpo expuestas al sol, sobre todo la cara, las manos y los pies. No hay que olvidar otras zonas, como las orejas, los labios y la nariz. En el caso de los párpados, en lugar de utilizar la crema solar, que puede entrar en los ojos, conviene más optar por una gorra de ala ancha que permite proteger esa zona.

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