Adiós a la grasa localizada en las caderas con la flancoplastia

La grasa localizada en las caderas no es fácil de eliminar y, a menudo, ni la dieta ni el ejercicio consiguen reducirla. Para estas zonas más difíciles se puede optar por la flancoplastia o troncoplastia, una de las cirugías plásticas que mejoran el contorno corporal, actuando de forma específica en los flancos.

El doctor Julio Millán Mateo, jefe de equipo de Cirugía plástica, reparadora y estética del Hospital Universitario Ruber Juan Bravo, subraya que el principal objetivo de la flancoplastia es lograr una figura más equilibrada.

Hablamos de la flancoplastia y de cómo consigue reducir la grasa en las caderas.

Qué cirugía elimina la grasa acumulada de las caderas

Se llama flancoplastia o troncoplastia y se usa para reducir el exceso de grasa y de piel en caderas y la parte baja de la espalda, es decir, la región lumbosacra, que suelen ser las más complicadas de mejorar con solo hábitos saludables.

Además, esta operación estética permite alisar la piel del cuerpo y realzar el trasero. Sobre esto último, el doctor nos explica que "al traccionar la piel en dirección vertical se consigue una elevación de los glúteos".

En definitiva la flancoplastia es idónea si deseas lograr los siguientes cambios en tu cuerpo:

• Reducir grasa acumulada en las caderas
• Lograr una silueta corporal más definida
• Elevar las nalgas
• Mejorar el aspecto de la piel de estas zonas específicas
• Atenuar la flacidez de caderas y trasero

A quién se recomienda la flancoplastia

En general se aconseja tanto a hombres como mujeres que presentan una excesiva flacidez en las caderas y los glúteos. Por otro lado, el doctor incluye otras características importantes como no presentar sobrepeso, no fumar y tener un adecuado estado de salud general.

Adiós a la grasa localizada en las caderas con la flancoplastia

En cualquier caso, durante la consulta previa a la cirugía se valora a cada paciente y se examinan las zonas a tratar, lo que permite averiguar la técnica más adecuada para lograr nuestro objetivo estético. Al mismo tiempo, se ofrecen una serie de pautas para llegar la intervención en las mejores condiciones.

Así es la flancoplastia para reducir la grasa en las caderas

Esta cirugía estética se realiza en el quirófano y requiere anestesia general. En cuanto al procedimiento, el doctor nos explica que "se practica una resección del exceso de piel tanto en la parte anterior del abdomen como en la parte posterior del tronco". Para ello, es necesario hacer unas incisiones en zonas poco visibles, como la línea del bikinis, para dejar ocultas las cicatrices.

Tras la operación, es necesario permanecer entre 1 o 2 días en el centro hospitalario. Después se puede regresar a casa donde se deben seguir los cuidados postoperatorios recomendados por el especialista.

El uso de faja se aconseja durante la primera semana. También se debe evitar el ejercicio intenso las dos semanas posteriores a la intervención. Al igual que en otras cirugías, es fundamental cuidar la zona intervenida, utilizar cremas que mejoran la cicatrización, acudir a las revisiones y quitar los puntos cuando lo indique el cirujano.

Por último, el doctor apunta que "la recuperación es breve, se necesitan entre 2 y 3 semanas para que el paciente vuelva a la rutina diaria".

Resultados de la flancoplastia y posibles riesgos

El cambio en el contorno corporal se observa en seguida. Eso sí, tras la intervención puede haber cierta inflamación en la zona intervenida, pero, poco a poco, se va percibiendo una silueta más armonizada.

Respecto a los posibles riesgos, los más comunes son hemorragias, infecciones, problemas de cicatrización, sensibilidad cutánea o hematomas. No obstante, el doctor hace hincapié en que "la probabilidad de que suceda algún tipo de complicación dependerá del cirujano que realice la intervención y de la técnica que utilice para minimizar los riesgos". Por tanto, es importante acudir a centros hospitalarios especializados.

Otras cirugías estéticas para el vientre y los muslos

Si deseas mejorar otras zonas del cuerpo, como el abdomen, los glúteos o los muslos, puedes hacerlo durante la misma intervención, ya que la flancoplastia es un tratamiento combinable con otras técnicas. "Se pueden realizar operaciones combinadas en un único momento quirúrgico o en varios, dependiendo de cada caso", aclara el doctor.

Lo más habitual es combinar la flancoplastia con la abdominoplastia, que es la cirugía plástica para lograr un vientre plano, y esto se conoce como abdominoflancoplastia o abdominoplastia circunferencial. De esta forma se consigue mejorar el aspecto del tronco y la cintura.

Otra opción consiste en realizar la flancoplastia junto a un lifting de la parte interna de los muslos, si queremos además unas piernas más atractivas, mediante el procedimiento de cruroflancoplastia interna. En cambio, si buscamos el efecto de elevar los laterales de los muslos, podemos optar por la cruroflancoplastia externa.