A través del tono de la voz es posible deducir si la persona que está hablando se encuentra enfadada, alegre o triste, de la misma manera que es una pista para saber si se trata de una mujer o de un hombre. El doctor Juan Carlos Casado Morente, codirector del servicio de Otorrinolaringología de los hospitales Quirónsalud Campo de GibraltarEste enlace se abrirá en una ventana nueva y MarbellaEste enlace se abrirá en una ventana nueva, añade que "la voz refleja emociones, sentimientos, sensaciones, estados de ánimo y, por supuesto, el género al que pertenece el hablante".

En el contexto actual, debido al teletrabajo, la voz ha adquirido una relevancia mayor a nivel profesional y personal por las limitaciones que ocasiona en aquellas personas que no se reconocen al hablar. Para ello, existen desde ejercicios para rehabilitar la frecuencia de la voz hasta la cirugía que modifica la laringe con el objetivo de feminizar o masculinizar el tono. Conoce en qué consisten.

El tono de la voz: qué dice sobre nosotros

Cómo masculinizar o feminizar la vozCómo masculinizar o feminizar la voz

Es tal su importancia que puede ser un factor influyente en una conversación. Además, es uno de los rasgos característicos de la persona, es decir, forma parte de su identidad hasta el punto de que se valora tanto como el aspecto exterior. Así lo señala nuestro doctor: "Cuando nos dirigimos a alguien por primera vez de forma presencial, nuestra voz adquiere el mismo valor que la imagen externa".

En cambio, si realizamos esta primera conversación a través del teléfono, no vemos cómo es la persona que hay al otro lado de la línea, por lo que la voz ocupa una mayor relevancia. Sobre ello, nuestro doctor nos explica que "todo el peso recae entonces en nuestro tono de voz, y esta circunstancia puede suponer un problema para aquellas personas que no se sienten identificadas con su frecuencia de voz y evitan el uso del teléfono debido a la confusión que puede generar".

A esto hay que añadir que el teletrabajo conlleva más contactos telefónicos y menos presenciales, por lo que la voz tiene una mayor importancia hoy día. De hecho, se ha observado un aumento de consultas relacionadas con ello, como apunta el doctor Carlos O'Connor Reina, también codirector del servicio de Otorrinolaringología en los mismos centros hospitalarios: "Hemos percibido un incremento de consultas de pacientes solicitando información sobre las opciones médicas a su alcance empujados por este nuevo escenario sociolaboral. Las personas que sufren discordancia entre su voz y su género ven reducidas sus opciones laborales".

Hacia la feminización o masculinización de la voz

La característica más importante de la voz es el tono, o la frecuencia, que puede distinguirse en:

  • Tono agudo, que es la voz estereotipadamente femenina.
  • Tono grave, que es la voz estereotipadamente masculina.

En la actualidad, es posible aumentar o disminuir el tono de la voz mediante tratamientos terapéuticos u otras herramientas, con ayuda de los especialistas en Logopedia. En esta línea, el doctor O’Connor destaca que "la rehabilitación con un logopeda ofrece unos resultados extraordinarios".

No obstante, existen casos que requieren cirugía para conseguir el efecto deseado en la voz, como nos puntualiza el doctor Casado: "En los casos en los que esta vía no logra los resultados deseados, proponemos un tratamiento quirúrgico cuyo objetivo es cambiar una laringe anatómicamente masculina en femenina o viceversa".

Ejercicios para cambiar el gesto vocal

Para ello se utilizan algunos de estos ejercicios:

  • Entonación
  • Resonancia
  • Flexibilidad cordal
  • Articulación
  • Vocabulario

Cirugía de las cuerdas vocales para modificar la voz

Se trata de un tratamiento quirúrgico de muy reciente incorporación que permite cambiar la anatomía de la laringe. En concreto, el doctor O’Connor nos detalla que "esta operación consiste en tensar o destensar las cuerdas vocales para que, de esta forma, el sonido que producen sea más agudo (cuerdas vocales tensas) o más grave (cuerdas vocales flácidas)".

Uno de los procedimientos consiste en la feminización de la voz, que es solicitado por:

  • Mujeres transgénero, puesto que la voz no se vuelve más aguda con la terapia hormonal.
  • Mujeres con un tono de voz grave a causa de problemas endocrinológicos, como los ovarios poliquísticos.

Otro de los tratamientos es la masculinización de la voz, que se realiza sobre todo en:

  • Personas con puberfonia, que es un problema de la muda vocal cuando cambia la voz en la pubertad.
  • Hombres transgénero, aunque la terapia hormonal con andrógenos suele agravar la voz, no siempre funciona así, y de hecho en un 20% de los casos no se logra.

Por último, el doctor Casado concluye que "a lo largo de las dos últimas décadas hemos asistido a una mayor demanda, ha pasado de considerarse una operación dirigida a profesionales de la voz o cantantes de élite para formar parte del concepto de salud en el sentido más amplio. Es decir, al alcance de todos".

Este tipo de terapias y cirugías son también demandadas por personas que se someten a operaciones de reasignación de sexo, con el fin de completar el cambio de género y que su voz se ajuste a su verdadera identidad.

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