Fármacos para la obesidad, a estudio

En España hay disponibles tres fármacos para la obesidad, que son Liraglutida; BN, que es la combinación de dos medicamentos, y Orlistat.

La toma de estos medicamentos puede ser un apoyo en la pérdida de peso, siempre que vaya de la mano de cambios en el estilo de vida. La doctora María Luisa De Mingo Domínguez, jefa de servicio de Endocrinología y Nutrición del Hospital La Luz, indica que "el tratamiento farmacológico para la obesidad siempre deberá ir acompañado de alimentación equilibrada y actividad física".

En este artículo, te contamos qué medicamentos se utilizan para adelgazar, los efectos secundarios y cuándo no están indicados.

Qué fármacos para la obesidad están disponibles

En Europa, se pueden prescribir tres medicamentos para la pérdida de peso, que son Liraglutida, Bupropion y Naltrexona combinados, y Orlistat. Conoce cada uno de ellos:

1. Liraglutida

Pertenece a los fármacos inhibidores del receptor GLP-1, y su uso se investiga desde hace años para el control de pacientes con diabetes y obesidad. En dosis diferentes se ha comprobado que puede ayudar a perder peso.

Según nos explica nuestra doctora, "este medicamento es un análogo de la incretina GLP-1, que se libera en las células L intestinales tras la ingesta de alimentos". Su efecto sobre el hipotálamo y en el vaciamiento gástrico, que se ralentiza, hace que la persona se sienta saciada y llena, disminuyendo así su apetito.

Otra ventaja es que reduce 8 veces la posibilidad de que una persona con prediabetes empeore a diabetes. "Un 77,3% de pacientes en tratamiento con Liraglutida 3 miligramos son ‘respondedores tempranos’, con una pérdida de peso mayor o igual al 5% a las 16 semanas de tratamiento", matiza la doctora.

Cabe advertir que este fármaco puede causar náuseas y vómitos como posibles efectos secundarios. Y, en caso de antecedentes de pancreatitis, se debe utilizar con precaución.

Recientemente, se ha publicado una investigación sobre el tratamiento de la obesidad con semaglutida, otro fármaco inhibidor del receptor GLP-1, y las conclusiones han sido positivas. Al respecto, el doctor Esteban Jódar Gimeno, jefe de servicio de Endocrinología, Diabetes y Nutrición del Hospital Universitario Quirónsalud Madrid, apunta que "hemos demostrado que logra unas reducciones de peso corporal significativas (16%) tras inyecciones semanales de 2,4 miligramos semanales durante dos años, sin rebote de ganancia de peso y con un perfil de riesgo cardio-metabólico favorable".

Fármacos para la obesidad, a estudio

2. BN, combinando Bupropion y Naltrexona

La combinación de Bupropion y Naltrexona, conocida por sus siglas BN, disminuye el apetito. En más detalle, la doctora De Mingo nos aclara que "BN es una combinación de dos fármacos que ejercen su acción en el sistema nervioso central, reduciendo el apetito, la conducta alimentaria compulsiva, como picoteos y atracones, y la sensación placentera por la comida".

Entre los posibles efectos adversos de este medicamento para perder peso están las náuseas, así como otros menos frecuentes como sequedad de mucosas, cefalea, mareos e insomnio.

También puede incrementar la frecuencia cardiaca, así que su uso puede desaconsejarse en casos de hipertensión arterial no controlada. Igualmente, la toma de BN está contraindicada en personas con epilepsia o glaucoma.

Por último, la experta nos avisa que "Bupropion es un antidepresivo, por lo que en la ficha técnica aparece una advertencia sobre riesgo de ideación suicida".

3. Orlistat

Este tratamiento médico para la obesidad logra disminuir la absorción de las grasas consumidas. Hay que advertir que puede causar diarrea y meteorismo como posibles efectos secundarios. Además, la experta añade que no se aconseja en casos de hepatitis.

Cuándo se recomienda tomar medicación para adelgazar

En general, se puede prescribir en personas con obesidad con un índice de masa corporal, o IMC, superior o igual a 30 kg/m²; así como en casos de sobrepeso, con un IMC superior o igual a 27 kg/m², que además tienen otros problemas asociados, como diabetes o tensión arterial alta, entre otros.

Cabe advertir que los fármacos para tratar la obesidad no se deben tomar en el embarazo, la lactancia y la infancia.

¿Se recupera el peso después del tratamiento?

Es cierto que se puede recuperar algo del peso perdido tras los tratamientos farmacológicos para la obesidad. De ahí la importancia de establecer nuevas pautas saludables al mismo tiempo que se toma la medicación. "Si los cambios en los hábitos se han aprendido de forma correcta y se mantienen tanto hábitos de alimentación como de ejercicio, la ganancia de peso tras el abandono del tratamiento será menor", matiza la doctora De Mingo.

Por su parte, el doctor Jódar también nos advierte de ello: "Si no se produce este cambio, ineludiblemente se recuperará todo el peso al terminar la intervención farmacológica". Por eso es fundamental concienciar a los pacientes de que el tratamiento farmacológico requiere incorporar cambios en el estilo de vida. En ese sentido, el doctor puntualiza que "deben acompañarse siempre e ineludiblemente de un programa de modificación de hábitos porque estos fármacos no son mágicos, sino que ayudan a la persona con obesidad a reducir el apetito y producen una saciedad precoz".

Otras características del tratamiento

• Fármacos para la obesidad, siempre bajo prescripción médica. Teniendo en cuenta que no están recomendados en todos los casos y que requieren cambios en el estilo de vida, es preciso acudir a los especialistas para tomar estos medicamentos, tal como remarca el doctor Jódar: "Estos tratamientos deben ser prescritos y supervisados por endocrinólogos que conozcan cómo es el funcionamiento de estos fármacos".
• ¿Qué pasa si no se obtienen los resultados esperados? En ese caso, se puede recomendar la interrupción del tratamiento. Sobre esto, la doctora puntualiza que "si después de 3 meses de tratamiento con la dosis máxima eficaz no se ha conseguido una pérdida de peso de más del 5% en personas no diabéticas o más del 3% en diabéticos, debemos retirar el fármaco por respuesta insatisfactoria".

Productos para adelgazar, ¿funcionan?

Cada vez es más habitual encontrar productos, plantas y tratamientos alternativos que venden la promesa de adelgazar, pero ¿resultan eficaces?

Hoy en día no existen evidencias científicas suficientes sobre las terapias alternativas, y lo mismo sucede respecto a plantas y otros extractos que se comercializan en herbolarios y farmacias. En este sentido, la doctora De Mingo comenta que "tienen limitada evidencia en humanos y ninguno de ellos tiene efectos significativos en la mejora del peso". Como ejemplos de estos productos se encuentran el té verde, garcinia cambogia, la Hoodia gordonii , la cafeína, la goma guar, el glucomanano, el chitosano o los probióticos.

Por eso, lo más aconsejable es acudir a la consulta de Endocrinología para informarse del tratamiento a seguir para perder peso de forma saludable y evitar la publicidad engañosa de algunos productos.